A D. QUIJOTE

A D. QUIJOTE

Desfacedor de entuertos imposibles,
con el cerebro seco de lecturas,
justiciero con métodos risibles,
torpe administrador de sus locuras,
inclinado a reacciones irascibles,
muy propias de un carácter sin fisuras.
Era Alonso Quijano el buen manchego,
mucho más toro bravo que borrego.

Nadie tome a chacota su locura,
que burlar no se debe a un caballero.
Loco sí, pero nunca un caradura,
y no necesitó de un burladero.
De atrezzo eran el yelmo y la armadura,
su pecho y su valor, de duro acero.
Nunca fue Don Quijote oportunista;
Sí abnegado, valiente y altruista.

Que se tienten la ropa los mezquinos,
cobardes, fementidos y follones;
inútil es que cieguen los caminos,
ridículo que lo hagan por “quiñones”.
Tan solo son estériles molinos
engreídos y fatuos gigantones
que en la noche y en forma asaz artera
arriaron medrosos mi bandera

Jesús (Madrigal)

D.Quijote

LIEBANA Y PELAYO

LIÉBANA Y PELAYO

En Liébana escondida en el desierto
Gozó la paz que muchos codiciaron
Jardín a la ambición jamás abierto,
Los muslimes su aroma no aspiraron,
De ricas producciones lindo huerto,
Sus frutas exquisitas no gustaron.
Resguardada por riscos y montañas
Fue la sola feliz en las Españas.

Liébana fue el albergue de la gente
Que del muslín feroz, corrida huyera.
Rincón de cielo puro y transparente
Que a todos agradó sobremanera
Que tan bello país graciosamente
Entre tan altos riscos se escondiera.
Otra Suiza en España hemos hallado
Un muro que jamás fue conquistado.

El él nació Pelayo, cuna hermosa
Centro de noble acción: de mejor vida
Digna; de historia sin rival preciosa
Que un necio olvido encarceló dormida.
¡Levanta noble Liébana frondosa!
¡Alégrate al mirarte renacida!
¡Enardécete al ver de vida un rayo,
¡Patria inmortal del inmortal Pelayo!

Eloy Alonso de la Bárcena
Cantabria